Esta ruta nos llevará desde la espectacular panorámica de la ría de Arousa, en el monte de A Pastora, hasta la visión más natural de los juncos, entrando en los márgenes del río Umia en su desembocadura.
El regreso se realizará entre parajes naturales de típica vegetación ribereña y plantaciones de albariño que con tanto cuidado se cultiva en la zona.
Datos técnicos
Inicio: monte de A Pastora
Fin: en el mismo lugar
Longitud: 3,5 km.
Dificultad: baja
Tiempo estimado: 1 hora y 30 minutos
Flora y fauna
Según sean las condiciones de humedad, podemos encontrar diferentes ecosistemas de especies vegetales (herbáceas, arbustivas, y arbóreas) destacando los formados por robles, sauces, alisos y laureles, además de comunidades de pinos y eucaliptos.
En los márgenes de la desembocadura del río, se dan unas condiciones favorables para el desarrollo de distintas especies de juncáceas. Éstas se benefician de una situación especial ya que el agua de la zona es una mezcla de aguas dulces que bajan desde el nacimiento del río, y aguas saladas que se adentran desde el mar, lo que se traduce en una zona de alto aporte de materia orgánica. De este ecosistema se aprovechan diferentes especies de aves a lo largo del año.
La situación geográfica del tramo de la ruta que transcurre por la orilla del río forma parte de la prolongación del Complejo Intermareal Umia-O Grove, que fue declarado Refugio de Fauna, Zona de Especial Protección para las Aves (CEE), Zona Húmeda de Importancia Internacional (RAMSAR) y Espacio Natural en Régimen de Protección General en 1990.
Descripción de la ruta
Comenzaremos el recorrido en el monte de A Pastora, desde donde se podrá observar la villa de Cambados, la desembocadura del río Umia y la ría de Arousa en todo su esplendor. En este punto podremos visitar las Ruinas de Santa Mariña y el Museo Etnográfico y del Vino.
En los primeros tramos del itinerario pasaremos por detrás del cementerio de la antigua iglesia parroquial para torcer luego a la izquierda y seguir por la carretera hasta el final de la zona asfaltada, dejando atrás un hórreo de tres claros, una curiosa construcción gallega. Desde aquí, y siguiendo por un camino de tierra, podremos observar las múltiples plantaciones de albariño y los distintos invernaderos que también son característicos de la comarca. También hay que destacar la presencia de otro hórreo que se eleva glorioso sobre la roca que lo sostiene.
A continuación, nos desviaremos a la derecha por un camino que nos permite gozar de la visión del juncal que descansa sobre el río Umia. En este tramo podremos ver la típica vegetación ribereña, como son los alisos, los sauces, los robles y los laureles, que conforman un paisaje único.
Al llegar al río Umia, podremos contemplar la influencia de las mareas en una laguna formada por la entrada del río hacia el corazón del juncal. Seguiremos el recorrido paralelo al río donde veremos los diferentes tipos de aves marinas de la zona.
Volveremos por un pequeño tramo por el mismo camino, continuaremos por la orilla del juncal, seguiremos andando por una pista a través de las tierras y al final tendremos la oportunidad de ver un pequeño bosque, a la derecha, con distintas especies de árboles ribereñas.
Para regresar, caminaremos por una carretera entre plantaciones de albariño. Deberemos continuar hasta llegar al monte de A Pastora, donde podremos disfrutar, si hacemos la ruta por la tarde, de una impresionante puesta de sol sobre el mar al anochecer.